Los intermitentes de adorno, la
jeta más grande que la espalda, la vergüenza perdida desde que naciste.
Eres un
desgraciado y un maleducado. Pero nada, ahí vas. Ahí sigues metiendo el morro
para incorporarte a última hora mientras yo llevo veinte puñeteros minutos en
la incorporación. Veinte puñeteros minutos esperando el momento de incorporarme
a la nacional mientras tú llegas con tu carita de niño pijo y tu coche caro a
meterte a última hora. Un sinvergüenza más. Por culpa de hijos de puta como tú
los demás tenemos que andar esperando durante minutos a riesgo de llegar tarde
a nuestro puesto de trabajo.
Y encima me tocas el claxon.
Encima te haces el ofendido. Pues por mis cojones que no pasas. Pero ¿Serás
cabrón? Hala, venga. Y te has metido. Vaya si te has metido ¿Qué haces payaso?
Una peineta ¿Me estás sacando el dedo corazón? Pues nada, otro día que no voy a
trabajar. Me va a dar igual. Te vas a cagar.
Te sigo, te sigo aunque me tenga
que meter por caminos imposibles. Aunque no creo que lo haga, seguro que vives
en alguna urbanización pija o eres ejecutivo en un edificio de cristal. Una
rotonda, dos, un giro, un recta y aparcas. Bien, aparcas en la calle. No eres
tanto entonces si no tienes una plaza de parking. Sólo un pelota rastrero con
ínfulas que se cree alguien y no llega a nada. Me acerco deprisa, tú no has
reparado en mí, cómo ibas a imaginar que el tipo al que has tocado el claxon te
iba a seguir hasta la puerta de tu trabajo. Si no te habías fijado ni en mi
coche como te ibas a fijar en mi cara.
Toma, una hostia. Y otra, y otra,
y otra, y otra más. Ahí te quedas sangrando, por gilipollas, y ahora me voy a
mi puesto de trabajo. Más a gusto que un arbusto. Más feliz que una perdiz. A
la próxima vuelves y te cuelas. A lo próxima vuelves y tocas el claxon. So
payaso.
Pues claro que volverás a hacerlo, pienso mientras te veo tomar un desvío
diferente al mío. Volverás a hacerlo y yo volveré a maldecirte mientras imagino
como te sigo hasta la puerta de tu trabajo y te inflo a hostias. Pero ¿Cómo voy
a hacerlo? Si soy un mierda que sólo se protege con la imaginación y si soy un
paria que no puede perder su puesto de trabajo.